miércoles, 2 de diciembre de 2009

El nombre del olivo (Para Abdo)



Dime amigo el nombre del olivo
Aquél que de noche parece brillar
Entre las sombras y los besos ocultos
De los amantes nerviosos apagando el deseo
Esfumado en el olor de las aceitunas.

Dime amigo el nombre del olivo
Para que en tu ausencia lo pueda regar
Con versos… porque no sé hacer otra cosa
No sé de la lluvia ni de la tierra
Sólo sé de las letras sangrientas del alma
De las palabras quietas de la pena.

Dime amigo el nombre de Dios
Aquél que te ha llamado desde el borde del mar
Entre el viento y la sal del silencio
Del corazón reventado por el dolor inmenso
Rasgado por el puñal de la despedida.

Dime amigo el nombre de Dios
Para que en tu ausencia lo pueda nombrar
Con el canto de la nostalgia
y la melodía de la resignación
El eco ya retumba en mis venas
Adiós amigo, adiós.

La pequeña capilla llora incienso
La niña intenta no llorar,
El pobre se ahoga en sus lágrimas…
El silencio grita sus últimos vacíos:
El amigo se desvanece en la oscuridad

Dime amigo ¿cómo te puedo retener?
Quisiera hundirte en la eternidad del momento
Y ya lo ves…aún intento evitar la despedida…
Todo por culpa del amor y de tu Dios
Deja marchar dice el uno
Obedéceme anuncia el Otro.

Dime amigo ¿cómo detener tu mirada?
Si es en los ojos que se produce el encuentro,
Sin ellos nada queda apenas ausencia
Y el eco del dolor
Retumbando en las venas de los dos
Adiós amigo, adiós.

Dime amigo tu verdadero nombre
Aquél escondido en tu esencia
El que no se dice con la voz
El que se grita con el espíritu
El que se conoce únicamente en la amistad.

Dime amigo tu verdadero nombre
Para nombrarlo mirando las estrellas
Para escribirlo en el agua serena del lago
En las nubes grises, en el viento y en la arena
Tu nombre dicho por los ángeles efímeros
Para escribirte desde la distancia infinita de la angustia.

La pequeña capilla llora incienso
La niña intenta no llorar,
El pobre se ahoga en sus lágrimas…
El silencio grita sus últimos vacíos:
El amigo se desvanece en la oscuridad


La Paz, 1º diciembre del 2009